Por Gabriela Moreno, paciente de ataxia cerebelosa, de México.
Soy Gabriela Moreno, de San Luis de Potosí, México. Estoy diagnosticada con ataxia cerebelosa. Y soy miembro del grupo 'Ataxia y atáxicos' en Facebook, donde a veces comento algo. Y ahora voy a contar una de mis experiencias:
Diario de Gaby: (Desconocimiento... intolerancia... incomprensión):
Gabriela Moreno |
Cambio mi “chip” mental mientras estoy saliendo de la oficina, aunque no puedo evitar sentirme embotada... Tomo un taxi, una unidad nueva para “mejorar” el servicio y llegar más rápido... Me preocupo: mi mamá me está esperando... y yo no he comido aún.
Subo al taxi, doy las indicaciones de mi destino. Puse de mi parte todo cuanto pude para que se me entendiera. Obviamente, no me entendía, (hablaba como borracha). Además, no podía coordinar mis pensamientos: eran demasiados para mí. Estaba tan cansada, que recargaba mi cabeza en el asiento.
El chofer empezó a decir sandeces... que si estornudaba fuerte, era para que se le salieran los mocos... que tenía “hueva” (flojera)... etc. Sólo llevaba monedas para pagarle, y mi falta de motricidad hace que me cueste trabajo reunirlas... y mucho más tardé intentando explicar mis problemas físicos... Concluyo que el taxista pensó que estaba borracha... Claro que ése no es un pretexto para justificar su comportamiento. Eso es algo de lo mucho con lo que tenemos que lidiar los/as atáxicos/as: DESCONOCIMIENTO, INTOLERANCIA, INCOMPRENSION, que sé yo.
Pareciera que me tengo que etiquetar "SOY ATÁXICA", o tener que usar una silla de ruedas para que se me considere discapacitada. Aclaro que yo no me considero discapacitada, pero este tipo de actitudes me hace retroceder, y que decaiga mi ánimo... Y no, no tomé el numero de carro: ya que en aquel momento lo que me urgía, era llegar.
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