La pagina web de "Ataxia y atáxicos" (información sobre ataxia, sin ánimo de lucro) es: http://www.ataxia-y-ataxicos.es/


domingo, 22 de mayo de 2016

¡Ay, esas conciencias!

Blog "Ataxia y atáxicos".
Por María Pino Brumberg, paciente de Ataxia de Friedreich, de Tenerife ... (ver el original en el enlace "fuente" ... al final del artículo).

"Todos, a pesar de nuestras limitaciones, somos capaces de lograr lo que nos propongamos con esfuerzo e ilusión".

María Pino Brumberg
Tenía que comenzar el texto de este viernes con una frase en particular, pero como me cuesta teclear, quiero aprovechar para contar un suceso que, una vez más me ocurrió hace poco, y me ha hecho volver a reflexionar:

Llevo tiempo posponiendo la visita a casa de una amiga en Las Palmas un simple fin de semana... por miedo, sí. Porque hace años que no lo hago... por diversas circunstancias y, sobre todo, por mis siempre crecientes limitaciones de mi ya gran dependencia. Total, que me decido a enfrentarme a este nuevo y divertido reto con dos amigas.

Así que llamo a Fred Osen para reservar mi pasaje y asegurarme de que la guagua gratuita que ofrecen desde Agaete a Las Palmas, donde vive nuestra amiga, la pongan adaptada. Y me contestan que la van solicitar. Bien... pero pido que me lo confirmen por si acaso… Al par de horas, me llaman para pedirme disculpas, porque ya no tienen ese servicio... ¿Y ya está? Pues sí: Decían no poder hacer nada.

Una amiga tendría que llevar su coche, y tendríamos que pagarlo. Llamé esa misma tarde, para ver si por lo menos Fred Olsen me ofrecía el transporte del coche gratuito, ya que no me permiten entrar en la guagua, que sí ofrecen a las personas que pueden caminar, pero a mí no... Y como ya había comprado mi pasaje... no podía ser. ¿Y entonces...? Entonces, nada…

Me cabreé, lloré de rabia e impotencia… Pero, no sólo por este caso con Fred Olsen, si no por todo, porque siempre me pasa lo mismo, al igual que a todas las personas que viven en situaciones similares a la mía. Pues cada vez que queremos salir, nos encontramos con un sinfín de barreras físicas, que hacen que nuestros acompañantes y nosotros cojamos nervios, y nos enfademos, quitándonos energías y ganas de salir. Me recordó a tantas épocas de mi vida… sobre todo, cuando comencé a usar un andador para caminar a losq 21 años... cuando empezaba a no poder entrar bien a restaurantes, bares, aparcamientos, cines, baños, playas, hoteles, conciertos… y hasta no me dejaron entrar en una discoteca con mis amigas hasta que un día grité y lo reclamé: les mandé un e-mail. Entonces sí.

Por más que me estrujo la cabeza, no lo entiendo. ¿Por qué tenemos que pasar por este tipo de circunstancias tan humillantes personalmente? ¿Por qué la sociedad nos sigue menospreciando? Y eso que nos acompaña una ley, que pretende facilitarnos nuestro día a día, desde hace 21 años. Pero que los responsables de cumplirla, siguen ignorándola en tantas ocasiones, aún hoy. Y esto sólo lo reclaman personas afectadas, o sus familiares... porque nadie quiere ver que a todos en cualquier momento, o a lo largo de sus vidas, tocará la discapacidad a sus puertas, ya sea por accidente, enfermedad, o hasta por envejecimiento. Y nos subestiman, como no.

Pero no... no puede ser. Mis amigas se cabrearon mucho. Todas soltábamos sapos y culebras por la boca, hartas de tantas injusticias. Así que tuve que sacar mis garras, cogí mi pluma y lo publiqué en mi estado en el Facebook, ya que mucha gente me sigue, y lo compartirían. Así fue... A la mañana siguiente, me llamaron desde Fred Olsen para seguir el caso de cerca, agradeciéndome haberles hecho darse cuenta de ese, muy grave, error. Fueron muy amables, y se comprometieron a solucionar el tema de la guagua para mandarla adaptada el día que vaya, y para siempre. Bien, rectificar es de sabios, y hay que reconocerlo. Gracias a todas las personas que me apoyan, vía Internet, me han ayudado a lograr este pasito para todas las personas con movilidad reducida.

En realidad el Señor Fred me ofreció tres posibles opciones: o llevar el coche de mi amiga, o que me fuera a buscar un taxi adaptado, o la guagua adaptada (que de todas formas la pondrán sí o sí, dicen… Lo debatí con mis amigas, pero la decisión era mía. Así que elegí que el 20 de mayo venga a buscarnos esa guagua adaptada, pues ya soy una perra vieja en estos campos, y sé que las palabras se las lleva el viento. Quiero hechos.

En varios comentarios de los muchos que me dejaron, me hicieron ver una de las cosas que yo misma predico bastante: no hay que pedir nuestros derechos, hay que exigirlos. Totalmente cierto. Pero yo creo que hay que ir con mucho cuidado en esta parte, ya que el colectivo de las personas con alguna discapacidad somos uno de los muchos colectivos desfavorecidos de esta sociedad.. También siempre he pensado, y seguiré pensando, que si queremos que se nos respete, debemos de respetar nosotros primero. Por ello, depende de a quién queramos dirigirnos: No creo que si, de buenas a primeras, nos ponemos a exigir, logremos cambiar las cosas. Depende de la situación, y de cada uno, claro. Yo es que aparte, también soy muy ingenua, y no va con mi carácter. A veces pienso que es un defecto, pero otras, veo que es una virtud.

Y termino con una cita de Bertrand A.W. Russell: “… gran parte de las dificultades por las que atraviesa el mundo, se deben a que los ignorantes están completamente seguros, y los inteligentes llenos de dudas”.

(Mery).

Foto de encabezado del blog de María Pino Brumberg

Fuente: Blog de María Pino: http://www.mariapinobrumberg.com/blog/?p=1629

**********

1 comentario: